Hace apenas unos días, cuando me dispuse a hojear las páginas del ABC, me impactó sobremanera la noticia de portada ''Pretenden eliminar los crucifijos de TODAS las aulas españolas''. Y yo empiezo preguntándome ¿españolas?, ¿aún existe España?, pero después vuelvo a la realidad y me doy cuenta que seguramente sea verdad. Otra acción más del ateismo radical impuesto por este gobierno socialista disfrazado con el nombre de laicismo.
Los crucifijos nos llevan acompañando desde que hace 2000 años Jesús de Nazaret predicara la palabra de Dios por Tierra Santa, nos han visto crecer y han sido la pieza clave del florecimiento de la cultura occidental. Los crucifijos son, como dijo Fraga en una entrevista, el símbolo de la Humanidad. ¿A quién le ofende ver un crucifijo en un aula? ¿por qué no critican el velo de Aminatou Haidar? ¿Por qué la Iglesia no puede opinar sobre política y los colectivos musulmanes sí? ¿por qué Educación para la ciudadanía es obligatoria y computable y Religión no?
Para responder a todos estos interrogantes hay que ser conscientes de lo que sucede hoy en día en este país, antiguamente llamado España, y es que la Iglesia Católica está siendo perseguida, algo que guarda un peligroso paralelismo con lo que sucedió en la venerada II República, donde se quemaban iglesias y conventos y se violaban a las monjas (la otra memoria histórica). Desde algunos diarios y medios de comunicación se alenta al anticlericalismo y, en consecuencia, al uso de la violencia contra lo relacionado con la Iglesia.
Han llamado de todo a los suizos por votar en contra de la construcción de un alminar musulmán... ¿por qué no se hace lo mismo con este gobierno que quiere cargarse la cruz de todas las aulas incluyendo las de los colegios privados? Los mendigos e indigentes no van a los ayuntamientos a pedir limosna, van a Cáritas; muchos se colocan a la entrada de las iglesias porque saben que ahí está la solidaridad. Millones de personas de la Iglesia en todo el mundo entregan su vida por ayudar a los demás sin obtener a cambio nada más que ver la sonrisa de esa gente inocente. Cursos de apoyo a minusválidos, a personas con deficiencias mentales, en los pueblos pequeños se vuelcan con apoyar la cultura del pueblo, a las amas de casa y, en definitiva, a todos.
Los Wyoming y compañía están desatando el odio hacia la Iglesia en esta juventud enferma, perdida y esclava de la ignorancia impuesta por la LOGSE. Pronto veremos arder iglesias y nos preguntaremos si es un trabajo para la clase de Educación para la Ciudadanía. ¿Libertad religiosa?, ¿laicismo?... más bien es anticatolicismo, al Islam no se le persigue sino que se le fomenta. La obsesión de la izquierda siempre ha sido destruir la esencia de todo cuanto se le ponga en su camino y este gobierno está haciendo lo propio. Su lucha no reside en la crisis económica sino en cargarse la cruz, cargarse la nación española y todo lo que la ha caracterizado a lo largo de la historia.
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